Espejo, espejito mágico....

Pues sí, decorar con espejos con acierto es hacer pura magia. Se gana luz, amplitud, profundidad... dando a cada estancia justo lo que necesita.

 Aquí os doy unos buenos consejos:

- Conectar con una bonita vista de una ventana, puerta que da un jardín: colocaremos un espejo de buen tamaño en la pared perpendicular a dicha ventana o puerta. De esta forma se verá la vista y se evitará reflejos.

- Crear un foco de atención. Queremos resaltar una zona de la estancia: una consola, una mesa de recibidor... Colocaremos una composición de espejos de distinto tamaño apoyados sobre la misma. Además llamaremos la atención de toda la decoración que pongamos delante: flores, pequeños cuadros...

 

 - Aumentar una estancia pequeña. Truco muy utilizado sobre todo en recibidores pequeños, por ejemplo. Si queremos dar amplitud, colocaremos el espejo en horizontal, y si lo que queremos es ganar altura, lo colocaremos en vertical (todavía más si lo colocamos apoyado y ligeramente inclinado hacia atrás, ver el ejemplo de la foto inferior)

 

- Aprovechar un armario para colocar el espejo, haciendo las veces de espejo de vestidor. Se utiliza en habitaciones, sobre todo, donde hay un gran armario, y el espacio nuevamente es reducido. Para que sea práctico, además sus medidas deben ser mínimo de 80 cm de ancho y 180 cm de alto.

NOTA DECORATIVA: los espejos colocados en los cuarterones de las puertas.

- Dinamizar la decoración. Para ello, utilizaremos composición de espejos. Hoy puedes encontrar muchas posibilidades, combinando modelos de diversas medidas.

- Dar sensación de orden. Si colocamos dos espejos iguales, colocados de forma paralela, incrementa siempre la sensación de orden y armonía (truco de decoración que podremos ver en infinidad de revistas, programas de decoración...).

- Espejos enfrentados. Este truco, lo he visto sobre todo en aseos o baños pequeñitos. Al colocar dos espejos enfrentados ganamos siempre en profundidad

Espero que os haya gustado!